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Horror en cómics de superhéroes

El superhéroe nace del cómic, y solo podía ser así porque a través del medio escrito difícilmente se podía estrenar la idea de que un ser dotado de capacidades sobrehumanas resultara ser un benefactor de la humanidad (salvo en el contexto religioso); en cambio, el cómic permitía presentar a esta figura con un aspecto que en cierta forma atenuaba la amenaza que suponían sus habilidades. Dicho esto, pareciera que la conexión entre los superhéroes y el horror no solo sería posible, sino también natural. Otra razón que hace compatible esta fórmula es que la imagen del superhéroe se exalta al enfrentarse a dificultades abrumadoras, imposibles de sortear para un mortal, circunstancias aterradoras, ya sea por la maquinación de un villano o por una fuerza de la naturaleza.

La portada de Action Comics, núm. 1 (1938), primer cómic de superhéroes, reflejaba el terror que es capaz de infundir un ser de fortaleza excepcional. (Fuente: superman.fandom.com)

Origen en común

Curiosamente, quizás el primer encuentro entre un superhéroe y algún elemento de horror sucedió antes del lanzamiento del primer cómic de superhéroes. Nos referimos al peculiar caso del Dr. Occult, de Jerry Siegel y Joe Shuster (creadores de Superman), un detective especializado en temas sobrenaturales que se enfrenta a amenazas que incluyen a personajes clásicos del horror, como vampiros, hombres lobo, muertos vivientes, entre otros.  Durante la serie de historias The Koth and The Seven, publicada en 1936, Dr. Occult cambia su atuendo de gabardina por uno más propio del superhéroe con capa, que incluso podía volar en el plano sobrenatural.

Viñeta de Dr. Occult the Ghost Detective. Occult y Zator vuelan a través del mundo sobrenatural, rodeados por entidades fantasmales (Fuente: More Fun Comics núm. 14, 1936).

Alternancia entre superhéroes y horror

La popularidad de los superhéroes en Estados Unidos decayó tras la Segunda Guerra Mundial (1945) por cambios en los gustos y preferencias propiciados por el nuevo contexto sociopolítico. Se considera que el terror, junto al género policíaco, fueron los reyes al inicio de la década de los cincuenta, cuando se superó la renuencia de la primera mitad del siglo XX para abordar la temática de horror en las viñetas, pero su auge sería frenado en seco en 1954 con la censura impuesta por la Comics Code Authority. Este hecho, en cierta forma, permitió la revitalización del género de los superhéroes que había perdido terreno durante esos años y, a la vez, supuso una situación complicada para las editoriales que se habían especializado en el horror, como EC Comics. Pese a este duro golpe, la influencia del cómic de horror ya no se perdería e incluso las grandes editoriales estadounidenses continuarían experimentando con el género hasta donde permitiera la censura. Con la relajación de las normas a partir de 1971, proliferó la integración de personajes novedosos o clásicos del horror a los respectivos universos de superhéroes, como los casos de Man-Thing, Swamp Thing, Drácula y Etrigan, por mencionar algunos.

El demonio Etrigan fue creado por Jack Kirby como un personaje que pudiera ser usado en cómics de superhéroes y horror. (Fuente: bloody-disgusting.com)

Cómics para asustarse

A continuación, algunos cómics de superhéroes en los que se hace muy presente el horror:

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