Star Wars: Doctora Aphra vol. 1: Aphra
La Dra. Aphra es un personaje que brinda la oportunidad de adentrarse en el fantástico mundo de Star Wars desde la perspectiva de un ser no sensitivo a la Fuerza, pero que por su oficio como arqueóloga, ayuda a descubrir y ahondar en los mitos de esta galaxia muy muy lejana. En esta entrega, Aphra intenta retomar su senda hacia la fortuna, luego de la proeza de escapar de Darth Vader. Pronto descubrirá que incluso alguien que ha sobrevivido al Señor Oscuro de los Sith puede ser superado por su propio padre, quien logra manipularla para que lo ayude a completar la investigación de su vida en torno a una antigua leyenda Jedi: el Ordu Aspectu. La doctora, cuya propia idoneidad será puesta en juego, se tendrá que valer de su astucia, ingenio y la peligrosidad de sus aliados (dos androides sanguinarios y un cazarrecompensas wookiee) para sobrevivir en un universo repleto de monstruos, criminales y oficiales del Imperio. El escritor Kieron Gillen cuenta una historia de acción y fantasía perfectamente insertada en lo que es Star Wars, con la presencia subyacente de la Fuerza y la tecnología reconocida por los fanáticos de la saga. La mayoría de este volumen es dibujado por Kev Walker, quien sobresale en los trazos de artilugios tecnológicos y cumple de manera satisfactoria a nivel de personajes, estos últimos algo caricaturizados, pero con excelente comunicación de emociones y dinamismo en la acción.
Harley Quinn Vol. 1: Hot in the City (The New 52)
Un benefactor anónimo le hereda a la Dra. Harleen Quinzel, alias Harley Quinn, una propiedad en Coney Island, Brooklyn, lo que la convierte en la arrendadora de unos pintorescos inquilinos. Las aventuras de Harley ocurren en medio de su esfuerzo por vivir de manera independiente. Contrario a lo que se podría esperar, la antiheroína se vale mayormente de actividades legales para cubrir sus gastos: su práctica psiquiátrica, competencia de “Renegade Roller Derby” y cobro del alquiler en su inmueble, aun así, sus actos cotidianos tienden a la ilegalidad; pero en la medida de lo posible, Harley trata de perjudicar solo a personas que ella considera que merecen un castigo. Amanda Conner y Jimmy Palmiotti nos adentran en la locura del personaje, lleno de eclecticismo, con el desarrollo de múltiples tramas que a base de acción y humor garantizan la diversión en cada número. El dibujante principal del volumen es Chad Hardin, pero ocasionalmente participa Stéphane Roux, a quien se le agradecen sus dibujos más realistas. Los colores a cargo de Alex Sinclair comunican la esencia del mundo de la desquiciada exsecuaz del Joker.
John Constantine, Hellblazer: Dangerous Habits
La vida de excesos del pícaro mago John Constantine finalmente le pasa factura en forma de una enfermedad terminal. El desgraciado inglés, que se ha metido con fuerzas que escapan de la comprensión, no solo sufre por la idea de morir, sino por lo que le espera a su alma en el tormento eterno que para él, es una certeza. Así que más que un deseo natural de aferrarse a la vida, Constantine necesita eludir a la muerte. El guionista Garth Ennis usa un tono reflexivo en su primer arco a cargo de la cabecera de Hellblazer, en el que pone toda la carne en el asador con un atrevimiento propio de él. Además del horror enmarcado en la fantasía urbana, propio de Hellblazer, la historia consigue el efecto terrorífico a través de la manifestación de los síntomas del padecimiento que desmejora en cada número al protagonista. En el apartado visual, la forma en la que el colorista Tom Ziuko usa una muy limitada paleta, con predominancia de elementos monocromáticos y muchos paneles que no superan los tres colores, mantiene al lector sumergido en una atmósfera lúgubre.