En 1983, Pat Mills tiene la oportunidad de escribir historias para el magazín de cómics 2000 AD, en Reino Unido, y decide darles vida a las aventuras de un bárbaro nacido de los mitos celtas de su región, como una versión del viejo continente de Conan el Bárbaro, pero con tintes particulares que lo alejarán del personaje creado por Robert E. Howard. El resultado de esta idea se convierte en Sláine.
El amanecer de un guerrero
Desterrado de la tribu de los Sessair, Sláine es parte de la élite de guerreros de su pueblo, los cuales son entrenados en las artes de combate desde niños, con habilidades como utilizar sus pies para arrojar lanzas a largas distancias y los míticos “espasmos”, una especie de cambio de berzerker, en el cual su cuerpo se deforma en el fragor del combate y su fuerza y resistencia aumenta, así como su deseo de sangre.
Una aventura por otro camino
Junto con el enano Ukko, su acompañante de viaje, Sláine se embarca en múltiples aventuras: una pelea en una cantina por demostrar qué mercenario mató a más enemigos en batalla, el hacerse dueño de una prisión en medio de la nada, el rescate de una doncella que será sacrificada, etc. Todas estas desarrolladas en un entorno en el cual la magia y el misticismo son el pan de cada día y, a diferencia de Conan, Sláine no tiene temor de la magia, ya que es algo que en su mundo es más común.
Este detalle apoya para que en sus historias se encuentren elementos fantásticos más integrados y explorados de manera diferente que en las de Howard. Mills honra el legado de este tipo de narrativa, pero las infunde de elementos conocidos de su región para hacerla lo suficientemente diferente para ser una oferta interesante para los amantes del género.
Mills y su entonces esposa, la artista Angela Kincaid, comienzan la odisea de un joven guerrero, que se profetiza regresará para convertirse en rey. El estilo de Kincaid marcó de inmediato las historias del personaje, convirtiéndolo en uno de los éxitos del magazín, que ya contaba con Judge Dredd entre sus filas.
La fuerza de los números
Warriors Dawn recoge las primeras apariciones del personaje, que adicionalmente a Kinkaid (mi artista favorito del tomo), también cuenta con historias ilustradas por Massimo Belardinelli (quien fuera el que visualizara por primera vez el “espasmo” de Sláine y sería un artista que hiciera carrera dentro de la editorial) y Mike McMahon (Judge Dredd), quien aplicaría un estilo diferente al establecido por los ilustradores que lo precedieron, separando el personaje y su mundo de otros proyectos de la editorial en ese entonces y abriendo camino para otros artistas con otros estilos visuales, como Simon Bisley (Lobo)
Sláine, al igual que muchas otras historias publicadas en el sello 2000 AD, son parte de la biblioteca digital de Rebellion.